Que feliz yo en aquellas épocas mías jugando con este juguetito, tan simple pero a la misma vez tan entretenido y divertido que están quedando en el olvido por culpa del cambio climático, de las videoconsolas, PC, etc etc.
El otro día le regalaron a un amigo mio uno y me no se me olvida aquel bailoteo que pegó aquel trompo, no se si es por que tengo ganas de volver a jugar al trompo o por que estos exámenes me hacen acordarme de cualquier cosa para no dejar concentrarme.
Bueno chavales, si a alguien le hace la misma ilu que a mi que me lo diga y nos hechamos unos trompos por ahí, en los chinos deberían de seguir vendiéndolos 😛
Saludos!!
PD: am, lo de comprarse uno para jugar no es de coña enn 😛
Deja un comentario